No todos los cabellos rizados son iguales. Por suerte, cada vez hay más productos que se adaptan a los diferentes tipos de rizos. Si conoces el tipo de cabello podrás utilizar los productos más adecuados para tenerlos dominados.
La textura del cabello marca la diferencia, es decir no es lo mismo tenerlo fino que grueso. Los finos necesitan champús, acondicionadores y productos de fijación que, además de activar los rizos, le aporten volumen y movimiento, mientras que los gruesos, más propensos al encrespamiento y a sufrir los efectos de la humedad, requieren tratamientos que realcen los rizos y los domine.
Si no eres capaz de dominar tus enredos lo mejor en este caso es desenredarlo con el acondicionador puesto y el peine de púas separadas y, ya fuera de la ducha, aplicar sobre el cabello húmedo una crema de peinado o un acondicionador sin aclarado para pelo rizado.
Por otro lado si usas espuma y ves que se te seca, la solución es probar hasta dar con la que te vaya mejor a tu tipo de cabello y sobre todo que tengan mucha hidratación. Los bálsamos moldeadores en texturas cremosas te darán mejores resultados.
Otras veces el rizo se deshace y esto sucede porque no se utiliza la cantidad adecuada. Si este no es el problema prueba a utilizar un producto de fijación más fuerte. Algunos de ellos mantienen los bucles perfectamente definidos y elásticos durante 24 horas. Enrosca los rizos con los dedos para que cojan forma y no los toques hasta que el pelo esté totalmente seco.
Si te sucede que no tienes tiempo de lavarte el pelo no te preocupes, humedece los rizos con una mezcla de agua y acondicionador, ya que no requiere aclarado y trabaja los bucles con los dedos para definirlos.
Por otro lado, los cortes escalonados disminuyen el peso de la melena, haciendo que las cascadas de rizos recobren toda su energía.
Imagen | ultimastendenciasmoda
Fuente:Centromujer
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